El ministro de la Marina, el valenciano Amalio Gimeno, en sustitución del de Fomento, visitó el puerto para inaugurar oficialmente las obras del construcción del dique exterior. Con anterioridad, el ministro visitó el crucero Princesa de Asturias, que había venido a la Feria de Julio a requerimiento del consistorio. El día 7 zarpaba el crucero no ocurriendo un grave accidente de milagro. Al salir se enredó en la cadena del ancla del cañonero Temerario. El 5 de septiembre llegaba el crucero alemán Victoria Luisa, que permaneció tres días. El Ayuntamiento le obsequió con un lunch en los Viveros.
Apenas había zarpado esta embarcación, atracaba la formidable escuadra inglesa del Mediterráneo. Está formada por cinco acorazados, un aviso y ocho destroyers. El puerto se vio muy animado y se permitió al público visitar los barcos. Hubo una matinée en el Apolo y un lunch en los Viveros. El almirante de la escuadra ofreció a las autoridades un banquete y partía el 15 de septiembre.
Pesca comercial en crisis
Por otra parte, la pesca comercial está en crisis. Hay unos 75 vapores pesqueros, con arqueo superior a 50 toneladas, y otros 100 menores, entre los que ninguno tiene matrícula valenciana. Atrasadísimos están nuestros pescadores en las artes y sus barcos se construyen por igual patrón que hace 60 años.
La construcción de buques no alcanza la altura deseada, ni es una fuerte industria barcas de bou y laúdes de cabotaje. Y eso que contamos con los tallereres Gómez, de la playa de Caro, constructores de los remolcadores Manuel María, con servicio en el Estrecho de Gibraltar, y del Monserrat en 1909. En 1913 destaca el Sueca, vapor de doble hélice adquirido por la Compañía Valenciana de Correos de África para la travesía ValenciaCullera.
Dique flotante y astilleros
Hay proyectos para dotar a Valencia de buenos astilleros. Destaca la construcción de un dique flotante y habilitar sobre la base de los talleres Gómez, unos grandes astilleros. La navegavión comercial valenciana ha crecido y además de barcos de vela y remolcadores, hay 32 vapores. Benlliure es el mayor, 2.528 toneladas arqueo bruto, 94.55 metros de eslora por 12.20 de manga. Los hay lujosos como Lázaro, Puchol y Sister, llamados las tres bicicletas por su velocidad. Llovera y Silvestre son yates de recreo. Los itinerarios de la compañía son las líneas de correos, el servicio semanal de Italia y el de Barcelona.
En 1912 entraron 3.207 buques, con un arqueo de 2.496.925 toneladas. De carga embarcaron 130.252 para cabotaje y 1.019.523 para el extranjero. La exportación de frutas, principal riqueza regional, se hace con buques extranjeros, sin que los millones de pesetas que importan los fletes queden en manos de los navieros de Valencia.