Quinientos delegados, en representación de los ochenta y seis sindicartos arroceros que hay en España, acudieron al Congreso Nacional Arrocero, en Valencia. Se celebró del 23 al 28 de febrero, y las sesiones de trabajo se realizaron en el Salón Teatro de la Casa de los Obreros de San Vicente Ferrer.
Los arroceros aspiran a la fabricación propia de sulfato de amoníaco. Mientras se logra, piden que se les entrege el importe del impuesto que grava su fabricación en pie de fábrica.
Igualmente, exigen que desaparezca el impuesto de 0’50 pesetas por 100 kilos de arroz cáscara que percibe la Diputación, como gravamen transitorio sobre los productos de la tierra.
También en materia monetaria, los sindicatos piden la concesión del canon tope de tres pesetas por cada 100 kilos de arroz cáscara, establecido en la Ley de 10 de marzo de 1934. Se destinarán a mejorar los servicios de la Federación Sindical de Agricultores Arroceros, y a fomentar sus obras sociales.