Por primera vez desde 1936, en abril se celebró reunión de claustro de la Facultad de Ciencias valenciana, que solicitó la dimisión del rector y de los cargos no elegidos por sistema democrático, y la retirada de la Policía del campus.
El primero de mayo transcurrió sin incidentes, sólo se lanzó algún cóctel molotov contra la tienda de Fasa-Renault, empresa automovilística que en su central de Valladolid vive tensiones laborales. En mayo, la víspera de la visita a España del presidente estadounidense, Gerald Ford, se arrojaron dos cócteles molotov al concesionario Chrysler, en la avenida del Cid. Continúan los cócteles en junio, y varios se estrellan contra la fachada del Instituto Nacional de Previsión, en la calle marqués de Sotelo; también se incendió un autobús del servicio público Saltuv.
Librería Universal
Dos artefactos explosivos se lanzaron contra la Librería Universal, en la calle de Artes Gráficas y en la de las Comedias, propiedad del presidente del Gremio de Libreros. También fue atacado el Centro de Estudios Norteamericanos, en la plaza de Manises y en la Sede de la Hermandad de Alféreces Provisionales, en la calle de la Paz. La madrugada del 27 de octubre, en la Facultad de Filosofía y Letras, explotó un artefacto y causó daños por 600.000 pesetas, que obligan a suspender las clases un día.
A final de año ha habido una huelga de una semana de los alumnos de la Facultad de Teología, del Arzobispado, hasta que el decano accedió a estudiar un proyecto de estatuto para el alumnado.