En enero, gracias al reportaje de LAS PROVINCIAS, fue detenido el joyero británico Robert Chatwin. Alojado en el hotel Dimar, fue reconocido por varios empleados. El joyero huyó de su país con 600 millones de pesetas en joyas. El juez dictó prisión provisional. Al final, el 20 de julio fue puesto en libertad según la legislación tras la reforma del Código Penal. Poco después, Chatwin se querelló contra los joyeros valencianos que lo denunciaron por estafa, quienes calificaron esta acción de "demencial".