El Valencia perdió este año la categoría en Primera División tras 55 años en la élite del fútbol español. Aunque la temporada terminó el 20 de abril, el equipo valencianista consumó el descenso matemático en la jornada anterior, el 13 de abril. El Valencia perdió el día 12 contra el Barcelona en el Camp Nou (3-0), y el 13 Cádiz y Betis se las arreglaron para empatar a cero en el Ramón de Carranza, y el Cádiz se salvó de la quema. La última jornada el Luis Casanova recibió, precisamente, al equipo gaditano. El Valencia le ganó, pero ya era muy tarde.
El equipo presidido por Vicente Tormo Alfonso llevaba varias temporadas luchando por mantenerse en primera, y esta vez no pudo esquivar el descenso. En la campaña 1982-83 un gol de Tendillo al Real Madrid, que privaba a este del título, junto a determinadas carambolas en varios partidos, ocurrido todo en la última jornada, hicieron el milagro y el Valencia se quedó en primera. Mientras, el déficit de la entidad se iba incrementando.
En cuanto al banquillo, empezó dirigiendo el equipo Óscar Rubén Valdez, pero en enero, la directiva le rescindió el contrato y contrató a Alfredo Di Stéfano por dos temporadas. Se necesitaba un revulsivo, y nadie mejor que aquel que dio al Valencia su último título de Liga, en 1971. El objetivo era más discreto, y más necesario.
La devacle deportiva acompañó a la económica, Tormo dimitió y Arturo Tuzón tomó posesión del cargo. En septiembre, los socios autorizaron a la Junta a hipotecar todos los bienes de la entidad. El Valencia dejó atrás cuatro Ligas, cinco Copas, dos Copas de Ferias, una Recopa y una Supercopa de Europa. La temporada 1986-87, el Valencia lucha porque sea la única en segunda división.